viernes, 14 de diciembre de 2012

La Champions League de las economías

Quizá buscar un símil entre fútbol, economía y política en la actualidad sea mucho más complejo que aquel que en su día don José Luís Rodríguez lanzó diciendo que España estaba en la Champions League de las economías mundiales. En la situación actual, marcada por la fuerte crisis económica, pero que es creadora a la vez que producto de una crisis política, encontrar la relación en una simple competición y todo el entramado que desgraciadamente padecemos los ciudadanos hoy en día es complicado, aún así, vamos a buscar una relación para hacer más comprensible el contexto actual.

Los mercados, esos grandes aliados de la Unión Europea -para qué engañarnos, de Alemania- y el propio órgano de poder, podrían ser comparativamente las televisiones, que controlan todo el entramado de horarios, dinero para los clubes, repartiendo por doquier y lavándose las manos cuando las cosas no van como deberían, siempre saliendo como parte beneficiada. Los equipos pequeños de Liga Adelante y Liga BBVA, se podrían asociar a países intervenidos como Irlanda, Portugal, y Grecia, o en vías de serlo, como Italia, por supuesto España entraría en el cupo -intervención bancaria-. Estos son los equipos que obran y reciben a merced de las televisiones, que se quejan a principio de temporada, pero se diluyen sus reprimendas hasta que vuelve a poner en jaque su economía -más aún- una medida polémica de los "jefazos". Por último, ahí están los dos grandes, Alemania y Francia, que perfectamente serían el Madrid y el Barcelona, quienes reciben siempre lo bueno gracias a lo malo de los demás, hacen casi todo bien, y además exigen al resto apretarse los cinturones. Inglaterra y algún país cuya economía esté en un momento no muy delicado serían los Sevilla, Valencia y Atlético, de vez en cuanto intentan poner trabas, pero como no se les molesta, no hay problema.

Obviamente todo es mucho más difícil de expresar que este simple artículo, pero seguro que a los usuarios que entiendan poco cómo va todo esto, y les gusta el fútbol, comprenderán a la perfección que España está en la segunda división nacional de la economía -y de la política- cuando hace escasamente cuatro años nos encontramos en la zona noble.

El ejemplo a seguir, sin duda, el Levante (Brasil), que en cinco años ha pasado de estar a punto de desaparecer a gozar de muy buena salud, a destacar en zona alta de su liga y entrar a la élite europea, donde nos tenía -o eso creía- colocados, el bueno de ZP. El sarcasmo no soluciona nada, pero ayuda a llevar las penas en ciertas ocasiones.

José Sousa